en bicicleta, iba a Ecatepec o alguna villa miseria del df, donde la destrucción ecológica supuestamente era brutal, en uno de los ríos, en el que me asomaba estaba sentada en una rama totalmente bajo el agua una artista -cuyo nombre no puedo recordar- anciana sentada con mi tía mara, que es bióloga. No se como respiraban, pero hablaban de proyectos de intervención para sanear el río que extranhamente yo podía escuchar. El rio era profundo y delgado, como una barranca o una herida, era de un verde oscuro y trasparente y yo podía perfectamente ver en sus profundidades... muy extraño porque había cientos de peces y corales de mar y yo me preguntaba si los contaminantes estarían a tal grado que habían generado vida marina en un rio de ecatepec.
Luego hay un aujero en mi memoria... pero acabo con mi abuela -que es extremadamente pequenha y la tengo que cargar (ademas es casi muda)- y mi padre bajando de un elevador rojo, hay una alberca gigante y la debemos cruzar por un puente delgadito. A la mitad, me pongo a pescar, tengo una canha profesional y casi inmediatamente saco algo, es un pez enorme y estoy consiente de que debo sostenerlo entre las manos y el piso con mucha fuerza. Es un pez peligroso, se resbala. Estoy pensando en sacarle los filetes mientras aun este vivo hasta que me doy cuenta de que tiene pies humanos. Es un pez-hombre y de la oreja -de pescado, no de hombre- le sale la cola de otro pez mas pequenho. Se revolotea y saco a la remora que es mitad pez, mitad celular. Ellos vendran a buscarlo. Tengo miedo.
Despierto a las 7:54 am.
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