martes, 9 de agosto de 2011

ayer fui al funeral de alguien.

su madre no pudo ir porque estaba del otro lado del océano atlantico.

le enseñaron el cadáver por skype.

telepatía fúnebre.

un cadáver ya no es una persona. se veía muerto, bien muerto.

me pidieron que le escribiera algo en un cuaderno que circulo entre los presentes.

empece usando la segunda persona.

pero no podía sentir que me escuchaba.

mis palabras iban al aire, al vacío.

acabe escribiendo a su familia.

los muertos se ven como los vivos, pero muertos.

me dieron ganas de tocarlo.

pero me dio frío.

por skype, la madre asistió también a los rosarios, y a la cremación .

lloro frente a una computadora, enlazada a otra computadora, frente a su hijo.

su hijo no lloro, porque los muertos no lloran.

no había buena conexión, pero pixeleado y todo, se veía muerto.



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