Es interesante pensar la relación entre El Arte y La Academia.
El Renacimiento es el origen moderno de la Academia, en donde las ciencias, las artes y las humanidades se instruían siempre en un entorno de enfoque humanista. El arte comenzó a centrarse en las ideas de perspectiva y humanidad, dejando atrás los intereses por lo divino y lo plano de la era medieval.
La historia del arte se convirtió entonces en un continuo desarrollo académico en donde los métodos de producción -la técnica- eran uno de los elementos a estudiar con mayor interés. Los estados fueron formando sus Academias de Arte (en Madrid y en México, la Academia de San Carlos), donde la instrucción era disciplinada y jerárquica. Las jerarquías no solo implicaban que al artista famoso se le hablara de usted y se le dijera Maestro (sin necesidad claro de contar con maestría), sino que además, las jerarquías se revelaban dentro de las mismas artes, la pintura por encima de la escultura, la escultura por encima del grabado, el grabado por encima de la cerámica... etcétera, etcétera.
Después de una larga historia de academia de cuatrocientos años, el arte termino por anquilosarse, alejándose de la realidad, la vida cotidiana y de las necesidades del hombre de finales del siglo XIX.Frente a ello, las vanguardias de la primera mitad del siglo XX fueron en gran medida un postulado contra la academia. El artista se convirtió en un bohemio, un flaneur que no obedecía a nada ni a nadie, especialmente en lo que a su producción se refería. Es el modelo del genio loco que se hereda de Van Gogh a Picasso y a Pollock. Un artista desenfrenado, solitario, irreverente, alcohólico, mujeriego. Un artista separado de la institución académica, critico del museo y de la universidad; cuya producción se relacionaba mas con la vida interior, lo visceral, la pasión.
El arte contemporáneo, por el contrario, con sus fundamentos en Duchamp, al centrar su atención en las ideas mas que en los estilos, se ha revelado como un arte que debe disciplinarse al análisis y la metodología de investigación propios de la filosofía y otras humanidades. Poco a poco, el arte contemporáneo se ha ido "academizando", acercándose cada vez mas al museo y a la universidad, al punto en que los artistas se han profesionalizado, de la manera en que los arquitectos o los diseñadores siempre lo han hecho. Artistas con carpetas presentables, listos para la investigación, vinculados con la curaduría y la historia del arte, profesores universitarios, organizadores de eventos culturales.
Las licenciaturas en arte ya no son suficientes, los artistas contemporáneos desean participar en la universidad de la misma manera que lo hacen sus colegas científicos. Los artistas desean gozar de todos los beneficios de la vida académica, porque su producción no es sólo un capricho pasional sino una manera de generar conocimiento. Los artistas han comenzado a buscar maestrías y las universidades (al menos en México) han sido superadas por mucho. En los tres últimos años se han abierto tres nuevas maestrías en arte para completar un total de seis. Pero no existen en el país ninguna en administración del arte, ni en curaduría, ni en docencia del arte, ni en arte terapia, por mencionar algunas posibilidades. Y no hablar de los doctorados, que aun hoy, se reducen a historia del arte, y no existe ninguna universidad mexicana que oferte doctorados en producción de obra visual.
En fin... yo, igual que cualquier artista de mi generación, estoy interesada en la vida académica, pero parece que el distanciamiento generado en el siglo XX es todavía una suerte de tabú para el desarrollo de las artes visuales.
Para mi, el flaneur también es un pensador.
3 comentarios:
No tiene mucho que conocí a una persona que me dijo "todos somos artistas", su comentario surgió al momento que le dije que yo, al menos, no me consideraba realmente un artista. Él dijo, él porque era hombre, que cualquiera que desea expresar algo es un artista...
A mí me apareció un argumento muy sofista, le comenté que no me molestaba realmente que fueran todos artistas, pero que se cuidara de decírselo a alguien que sí le importara el titulo “Les puedes romper el idilio”, le dije. Me contestó que sería como decirle a un enamorado que existen otras personas que se enamoran.
El argumento me suena, hasta la fecha, extremadamente complaciente, pero será que estoy en mi etapa de complacencia.
Saludos Larisa, me gustó mucho tu breve pero sustanciosa recapitulación del arte/academia, CARAJO te la echaste desde el Renacimiento!!!!
saludos! gracias por seguir asomándote por estas tierras... Beuys decia que todos los seres humanos somos artistas... yo a veces lo pienso y otras no. esta complicado.
Es difícil eso de ser o no ser lo que sea… supongo. Aquí seguiré dándome mis vueltas, siempre tienes algo bueno para leer.
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